El petiso, el enano, el viejo sombrerudo
Cuando hacemos el esfuerzo por superar esa arraigada subestimación que -sobre todo en la urbanidad- tenemos sobre las historias de "cosas raras que aparecen en el monte" (que se traducen en risas, chistes y tristes columnas en los diarios sobre un folklore simpático y ridiculizado) nos encontramos con relatos de altísimo valor histórico y socio-cultural que transitan en la oralidad de nuestros campesinos.